MEDELLÍN,   COLOMBIA,   SURAMÉRICA    AÑO 5    NO 49   OCTUBRE DEL AÑO 2002    ISSN 0124-4388      elpulso@elhospital.org.co
Avances del Sistema de Seguridad Social en Salud 2001-2002

Jairo Humberto Restrepo Zea Grupo de Economía de la Salud Centro de Investigaciones Económicas, Universidad de Antioquia - Medellín

El Consejo Nacional de Seguridad Social en Salud, como organismo de dirección de carácter permanente, presentó en julio pasado su informe anual, que da cuenta de la evolución del Sistema a su cargo. Aunque no se trata de una rendición de cuentas, este protocolo es una comunicación importante entre este organismo y el legislativo, que posibilita un mayor debate sobre los logros y perspectivas de la seguridad social.

En esta ocasión, se cuenta con un informe corto en cuya parte sustancial se destacan los avances del Sistema y las dificultades que se enfrentan para su sostenibilidad y el logro de las metas consagradas en la Ley 100. En general, puede catalogarse como un informe realista, aunque también tiene algunas carencias y falta de profundidad en aspectos cruciales de evaluación de la reforma y perspectivas para el nuevo gobierno. Por otra parte, con la excepción del asunto presupuestal, no se hace explícito un mensaje al Congreso acerca de las labores que éste puede adelantar o de los compromisos del Consejo para sacar adelante la reforma.
Balance global
Por tercer año consecutivo, el Consejo advierte sobre varios hechos que amenazan la estabilidad del Sistema, reconociendo cada vez más las dificultades que se derivan de la situación laboral y las perspectivas de las finanzas públicas y la política económica. De igual modo, se reitera una paradoja que se ha vuelto costumbre en estos informes, y es que a pesar de reconocer las dificultades, se afirma que "se ha avanzado en la consolidación del Sistema", aunque en realidad poco se argumenta esta afirmación.

Se afirma que "se ha avanzado en la consolidación del Sistema", aunque en realidad poco se argumenta esta afirmación.
Algunos temas esbozados en el informe, particularmente en la introducción, dan cuenta de aspectos positivos de la gestión, los cuales merecen ser abordados con profundidad para despejar el futuro del Sistema y consolidar la labor del Consejo: los efectos del ajuste fiscal sobre el futuro del régimen subsidiado; la redistribución financiera por enfermedades de alto costo (Acuerdo 217 del Consejo); la necesidad de una Ley Estatutaria que ayude a moderar los gastos por tutelas, así como de una mayor racionalización jurídica; la diferenciación de las enfermedades ocupacionales para aliviar cargas sobre las EPS; una mayor vigilancia sobre los recursos públicos, en coordinación con la Procuraduría y la Defensoría del Pueblo; y la ampliación del Plan Obligatorio de Salud -POS-, con la incorporación de diez principios activos nuevos y la inclusión del acelerador lineal para el tratamiento de radioterapia.
El régimen contributivo está en crisis
Aunque no se hace explícito en el informe del Consejo y solo se reconocen dificultades financieras transitorias, la información suministrada enseña una crisis bastante compleja que se expresa en el estancamiento de la cobertura y el desequilibrio financiero a nivel macro.
En primer lugar, la crisis de cobertura se expresa en el hecho de que, comparado con el año 2000, el número de cotizantes se redujo en cerca de 55.000 personas y el total para el país sigue siendo inferior al de 1998 (ver Cuadro 1).
Como consecuencia de este comportamiento, la cobertura del régimen sigue estancada como proporción de la población del país y continúa su reducción en relación con los ocupados. En efecto, por una parte, ahora la cobertura es apenas del 31% de la población total, con una diferencia cada vez menor con la que se tenía al momento de expedirse la Ley 100 (22%), cuando no se cubría a la familia del cotizante; por otra parte, como proporción de la población ocupada, la cobertura ha descendido en más de tres puntos porcentuales en los últimos dos años, lo cual muestra la discrepancia estructural entre el empleo y la seguridad social que se financia con impuestos sobre la nómina.

El déficit en el régimen contributivo se ha cubierto en los últimos 3 años con los resultados positivos de los primeros años y aún se poseen recursos para sortear tal vez un año más de déficit.

En segundo lugar, la situación financiera del régimen contributivo es muy preocupante y es así como el Consejo reconoce que la vigencia del año 2001 ha sido "la más crítica en lo que ha transcurrido del nuevo sistema de salud" (Informe, p. 19). Si bien a diciembre 31 de 2001 el déficit de la cuenta de compensación del Fondo de Solidaridad y Garantía -Fosyga- ascendió a $ 167.000 millones, se advierte que aún falta ajustar la compensación del ISS y de Cajanal, lo que podría incrementar esta cifra en otros
$ 51.000 millones.
Este déficit se encuentra explicado, principalmente, por el aumento de la densidad familiar o el número de beneficiarios por cada cotizante, el cual pasó de 2.48 en el año 2000 a 2.51 en el 2001, consolidando la tendencia creciente de los últimos años. Además, aunque no se menciona en el informe, es importante tener en cuenta que la crisis del empleo afecta seriamente los ingresos dada la tendencia de la masa salarial a crecer por debajo de la inflación, así como a la inestabilidad del empleo, siendo más frecuentes las personas que cotizan períodos inferiores al año y con remuneraciones inferiores a la necesaria para mantener el equilibrio.
Es importante destacar que el déficit en el régimen contributivo se ha cubierto en los últimos tres años con los resultados positivos de los primeros años y aún se poseen recursos para sortear tal vez un año más de déficit. Además, para amortiguar la situación de 2002, se aumentó la Unidad de Pago por Capitación -UPC- en 4%, lo cual significa una reducción real de 2%, medida catalogada por el Consejo como una "decisión responsable" (Informe, p. 2), y se redujo la asignación de recursos para la cuenta de promoción y prevención del 0.5% al 0.16% del Ingreso Base de Cotización -IBC-. Estas dos medidas reportan un ahorro de cerca de $ 180.000 millones.
En el caso del régimen subsidiado, según la presentación que hace el Consejo, hay un "panorama menos preocupante”
Régimen subsidiado: ¿podrá ser verdad la dicha?
En el caso del régimen subsidiado, según la presentación que hace el Consejo, hay un "panorama menos preocupante" (Informe, p. 2). Se da cuenta entonces de un aumento importante de recursos y de la cobertura, aunque se reconoce la persistencia de problemas en la gestión y flujo de los recursos, dificultades impuestas por las políticas del Ministerio de Hacienda en materia de cupo fiscal y el reiterado incumplimiento del gobierno para atender la deuda con el Fondo de Solidaridad y Garantía y los aportes que debe realizar al mismo.
El aumento de recursos en este régimen es algo que merece mucha atención con el fin de determinar si ello es real y se mantendrá en el tiempo, o si es apenas un asunto de coyuntura o presentación de cuentas con cierta ilusión y buena despedida del gobierno que terminó en agosto pasado. Sorprende el aumento tan importante que aparentemente presentaron en 2001 los recursos para la afiliación al régimen, lo cual estaría explicado principalmente por una destinación excepcional de rentas cedidas (recaudos por impuestos a los licores, cerveza y loterías) y situado fiscal, así como un aumento de los recursos de solidaridad (Cuadro 2).
Sin embargo, parece que no existe certeza sobre la aplicación de estos recursos para la afiliación, y es así como si bien se reportan un poco más de once millones de personas, se reconoce que la base de datos disponible "tiene un total de 8´870.020 registros" (Informe, p. 11). En resumidas cuentas, de la lectura del informe no queda suficiente claridad acerca de la realidad de la cobertura del régimen subsidiado.
Otros dos aspectos críticos que desata la lectura del informe se refieren, en primer lugar, al hecho de que la cobertura del régimen subsidiado continúa tomando como denominador la cifra de población con necesidades básicas insatisfechas, cuando por una parte en el escenario actual resulta más sensato adoptar la perspectiva de la pobreza por línea de ingresos, y, por la otra, varios trabajos han reconocido que dentro de la población cubierta (el numerador) existen personas que no son realmente pobres. En consecuencia, una depuración estricta del denominador reduciría la cobertura real al menos a un 40% de la población potencial.
Y en segundo lugar, sorprende que para el Consejo, el régimen subsidiado "garantiza la atención en salud a más de 11 millones de colombianos de la población pobre y vulnerable del país" (Informe, p. 2). Es importante recordar que si bien el seguro es una facilidad para el acceso de la población a los servicios, el mismo no es suficiente para eliminar otras barreras o incluso dado su esquema de administración, acaso puede generar otro tipo de barreras. En especial, como se presentó en informe del periódico El Pulso de agosto pasado, preocupa la persistencia de barreras geográficas, culturales y económicas, así como la serie de obstáculos para garantizar un acceso integral.
¿Cómo va el mercado de aseguramiento?
Por último, la evolución reciente del Sistema enseña dos aspectos importantes en cuanto a la configuración del mercado de EPS y ARS. En primer lugar, en el régimen contributivo persiste una distribución del mercado que desfavorece enormemente al ISS y consolida varias EPS privadas. Aunque el ISS sigue ocupando el primer lugar, en cuanto al número de afiliados, su participación continúa reduciéndose y ha pasado de un 60% en 1998 al 27% en 2001. Como contraparte de esta situación, se aprecia el comportamiento de Saludcoop y otras EPS privadas, dentro de las cuales algunas han presentado incluso mayores incrementos así posean una participación baja, como es el caso de Famisanar, que ya ocupa el cuarto lugar.
Y en segundo lugar, aunque falta información detallada sobre el particular, el mercado de las ARS ha sufrido la depredación ordenada en el Decreto 1804 de 1999 y el número de estas entidades se redujo a una quinta parte, con 42 reportadas en el informe del Consejo. En este mercado se tienen inquietudes acerca de la sostenibilidad de la UPC, aspecto del cual no se ocupó el informe.

Cuadro 1 Régimen contributivo: población compensada 1998-2001
(Cifras anuales del Consejo Nacional de Seguridad Social en Salud)

(*): Para los cotizantes, se estima la cobertura como porcentaje de la población ocupada en el país; para compensados o población afiliada, como porcentaje de la población total nacional.
Fuente: Informes del Consejo. Cálculos del autor. CIE - Universidd de Antioquia.

Cuadro 2 Régimen subsidiado 1995-2001: Cobertura, recursos y número de administradoras (ARS)
(*): En 2001 se incluyen 10 EPS indígenas, autorizadas a partri del Decreto 330 de 2001.
Fuente: Informes del Consejo. Cálculos del autor. CIE - Universidd de Antioquia.
 
 
 







 



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