MEDELLÍN,   COLOMBIA,   SURAMÉRICA    AÑO 8    NO 102  MARZO DEL AÑO 2007    ISSN 0124-4388      elpulso@elhospital.org.co






 

 

El 37% de los residuos que
anualmente produce el Hospital son reciclados
20 años de manejo responsable y efectivo de los residuos
Patricia Ossa Ocampo - Periodista - elpulso@elhospital.org.co
El Hospital Universitario San Vicente de Paúl es la institución hospitalaria más grande que tiene Medellín y el país, y si no hiciera una adecuada gestión de los residuos que genera, ello constituiría un gran problema para el medio ambiente. Consciente de esta situación, el Hospital es y ha sido pionero desde hace 20 años en programas de manejo de residuos: hoy día puede presentar orgullosamente los excelentes resultados obtenidos, que representan grandes beneficios tanto para la comunidad como para el cuidado de su entorno.
El Hospital produce al año alrededor de 150 toneladas de residuos que son reciclados y comercializados a través de Corpaúl, gracias al programa de separación adecuada de residuos que se maneja a través del Área de Salud Ocupacional. El doctor Álvaro Londoño, jefe de Salud Ocupacional del Hospital, señaló que de todos los residuos producidos en el Hospital, el 37% son reciclables, el 38% es material de residuos ordinarios que va al relleno sanitario y el 23% son residuos biosanitarios inactivados.
La historia del Programa de Separación de Residuos dentro del Hospital se remonta a 1985, cuando surge la preocupación por darle un manejo adecuado a los residuos generados por la atención de los pacientes. Luego, en 1987, se generó un programa más amplio en manejo de los residuos por riesgo biológico; por ese entonces se establecen acciones de coordinación con la Dirección Seccional de Salud de Antioquia, el Área de Epidemiología del Hospital y de otros hospitales, para lograr que se estableciera un servicio de recolección diferenciado para las instituciones hospitalarias: dicho servicio se conoce actualmente
como la “Ruta Hospitalaria” de las Empresas Varias de Medellín (EEVV de Medellín), un servicio particular y especializado de recolección de los residuos hospitalarios.
El programa continúa evolucionando, se inicia una etapa de reciclaje que posteriormente fue asumida por Corpaul en 1994, y a partir de 1998 el Programa es asumido nuevamente por el Área de Salud Ocupacional del Hospital. A partir de ahí se dan varios hechos importantes, que influyen en la evolución de la política institucional para el manejo de residuos, como es el surgimiento del Ministerio del Medio Ambiente, que formula una serie de normas legales para regular la gestión de residuos hospitalarios y similares.
Aunque ya se había avanzado mucho en el Programa de Separación de Residuos, hubo un momento crítico que hizo necesario un crecimiento acelerado en el manejo eficiente y adecuado de los residuos. Fue en el año 2000, cuando se hizo inminente el cierre del Relleno Sanitario Curva de Rodas, debido a que hizo crisis; ello condujo a que Medellín y su área metropolitana se quedaran sin un sitio adecuado para depositar los residuos y, en consecuencia, la pregunta era: ¿Qué hacer con los residuos hospitalarios? En ese misma época entró en vigencia el decreto 2676 de diciembre de 2000, que obligaba a un manejo mucho más específico de los residuos hospitalarios, por lo cual fue necesario pensar en soluciones rápidas y eficaces que contribuyeron a mejorar el programa existente.
Separar: lo más importante
La adecuada separación es la clave del éxito de la política general de manejo de residuos, debido a que los residuos hospitalarios se
clasifican y posteriormente se les da un manejo especial de acuerdo con sus características. Así, para el Hospital existen varios tipos de residuos con sus respectivas sub-clasificaciones.
La clasificación más básica es separarlos en residuos no peligrosos y los peligrosos. Dentro de los no peligrosos encontramos a los reciclables y los no reciclables. Los residuos reciclables son manejados por Corpaúl y los no reciclables son sub-clasificados y manejados en el Hospital, de tal modo que se
racionalicen los costos y gastos para su gestión interna y externa.
Dentro de los residuos peligrosos encontramos a los biosanitarios, clasificados según el grado de amenaza de contagio de enfermedades que representan para quien entra en contacto con ellos. Los residuos infecciosos o de riesgo biológico, que son todos aquellos que pueden estar contaminados o contener gérmenes que pueden transmitir enfermedades a personas o animales, también tienen una sub-clasificación:
- Biosanitarios: Todos los residuos o utensilios desechables contaminados con fluidos y secreciones resultantes de la atención a los pacientes.
- Residuos anatomopatológicos o tejidos, partes anatómicas incluyendo sangre no transfundida o parcialmente transfundida, tejidos, partes y fluidos corporales que se remueven durante las cirugías, procedimientos de necropsias y estudios especiales.
- Cortopunzantes: Residuos desechables que se usan durante las cirugías y asistencia a los pacientes, que están contaminados con sangre o fluidos corporales.
- Residuos químicos: Sustancias o compuestos químicos como reactivos, medicamentos citotóxicos que se usan en la lucha contra el cáncer, aceites usados en laboratorios, reactivos de laboratorios, líquidos hidráulicos, líquidos reveladores, fijadores y residuos de isótopos reactivos.
- Medicamentos parcialmente consumidos y residuos de la quimioterápia.
- Metales pesados: Como plomo, cromo, cadmio, bario, níquel, estaño o mercurio.
Cabe aclarar que en el Hospital Universitario San Vicente de Paúl no se generan residuos de animales de experimentación.
En segundo lugar están los residuos no peligrosos, como:
1. Reciclables: Papel, cartón, plásticos, vidrios, que se manejan a través de Corpaúl.
2. Residuos inertes: No son biodegradables, como el icopor, el papel carbón y algunos plásticos especiales que no permiten una descomposición; en el caso de los residuos de icopor, el Hospital los disuelve con un solvente y los reutiliza para la impermeabilización de losas y techos. Los escombros son dispuestos en las escombreras municipales.
3. Residuos comunes u ordinarios: Son aquellos que no son peligrosos y no son reciclables; este tipo de residuo va directamente al relleno sanitario.
4. Residuos biodegradables: Residuos de la preparación de alimentos, cubierta vegetal, poda de prados y árboles. Los residuos de madera se envían a una fábrica de carbón vegetal.
Manejo adecuado
Una vez separados y clasificados, los residuos reciben el tratamiento que les corresponde según sus características. En cada una de las áreas del Hospital se tienen los recipientes adecuados y suficientes para el manejo interno de los residuos.
Hay residuos de tipo radioactivo porque en el servicio de Medicina Nuclear se trabaja con isótopos radioactivos. El contratista que hace la gestión interna dispone de la licencia necesaria para realizar este trabajo: en recipientes plomados se hace una desintegración de los períodos correspondientes, se dejan 10 semi-períodos y una vez superado el límite de extensión radioactiva, se disponen como residuos ordinarios (son sometidos a un tratamiento de decaimiento y luego se disponen como residuos ordinarios, que van al relleno sanitario).
Los residuos anatomopatológicos provenientes de patología son unos 510 kilos al mes; éstos son identificados, rotulados y dispuestos en bolsas negras, y puestos en el servicio de patología donde hay una cava refrigerada para el almacenamiento; en los días en los que se ha coordinado la recolección con Empresas Varias de Medellín, se llevan congelados al sitio de la recolección, para llevarlos a la incineración.
Los residuos corto-punzantes de los cuales se generan en promedio 650 kilos al mes, se depositan en contenedores específicamente destinados para este fin, son remitidos al sitio de acopio y se envían a incineración.
Los residuos bio-sanitarios, que en promedio son 8 toneladas mensuales, son inactivados térmicamente en tres (3) equipos denominados autoclaves en el sitio de acopio final, y luego de cumplir los requisitos de tipo técnico se alistan para que sean recogidos por la Ruta Hospitalaria.
Los residuos químicos son medicamentos de los que se genera muy poca cantidad debido a la Gestión de Compras y manejo de inventarios, por lo que generalmente sólo son medicamentos parcialmente consumidos; éstos se envían para disposición final a través de la incineración.
Los residuos de aceites líquidos hidráulicos de las máquinas se manejan a través del programa de recuperación de aceites que adelanta Corpaul; y para los residuos de líquidos de revelado y fijado del área de imágenes diagnósticas, el Hospital adelanta un programa de calidad en imágenes diagnósticas: esto hace que el contenido de plata de estos líquidos sea mínimo. Por ejemplo, en mamografía se utiliza solamente un ciclo de revelado y en radiografía
convencional dos ciclos de revelado, a diferencia de otras instituciones que hacen recirculaciones múltiples con mayores contenidos de plata.
Costos: Otro aspecto importante
La gestión integral de los residuos hospitalarios involucra un componente financiero en la medida en que se hacen necesarias unas inversiones financieras para el funcionamiento del programa (canecas, bolsas, costales, indicadores biológicos, tecnología, salarios y prestaciones, etc.), que hacen necesario encontrar su máxima eficiencia.
La compactación de los residuos ordinarios condujo en el ejercicio del 2006 a un ahorro en dinero no pagado por concepto de tasa de aseo de $125 millones y a un ahorro de $247 millones por concepto de dinero no pagado por incineración de residuos biosanitarios. Las gestiones internas para realizar el aforo interno a los terceros condujo a recobros por valor de $101 millones. Puede observarse entonces que las opciones tecnológicas tienen mucho que aportar a la gestión interna y a la contención de los costos que implica el Plan de Gestión Integral de Residuos Hospitalarios.
Finalmente puede concluirse entonces, que después de más de 20 años trabajando en programas serios y rigurosos de adecuado manejo de residuos, el Hospital Universitario San Vicente de Paúl constituye una institución pionera y propositiva en esta materia, generando propuestas que benefician a toda la ciudadanía.
 
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