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En alerta
se mantiene el Hospital Universitario del Caribe, el más
grande de Cartagena y Bolívar, por las millonarias deudas
de Empresas Administradoras de Planes de Beneficios (EAPB).
La gerente, Elga Ehrhardt Gutiérrez, detalló que
a junio de 2014 las cinco EAPB más deudoras son Caprecom
con $10.400 millones, Comfamiliar Cartagena con $9.409 millones,
Alcaldía Mayor de Cartagena de Indias - Dadis con $7.926
millones, Salud Vida con $3.837 millones y Caja de Compensación
Familiar de Córdoba -Comfacor- con $2.377 millones. A
fines de septiembre, estas deudas mantenían su tendencia
creciente.
Manifiesta la gerente Ehrhardt que en el Hospital se atienden
casi a 13 millones de afiliados de estas EAPB, y hace un llamado
apremiante de que ojalá le paguen al Hospital porque
está en crisis, algunas de estas deudas llevan ya más
de un año y empiezan a haber problemas en los pagos de
los médicos y las enfermeras. |
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Ya se denunció
ante los diferentes entes de control las prácticas dilatorias
de pago de las EPS, indica la directiva: Ya se han agotado
muchas vías para el cobro del dinero y así alcanzar
el equilibrio que debe tener nuestra entidad, pero no existe
voluntad real por parte de algunas entidades que no reciben
la facturación, nos devuelven las cuentas y son reacias
incluso a conciliar, pues no existe un mecanismo real que las
obligue. Las EPS no muestran voluntad de pago, y los entes territoriales
y nacionales responsables de la salud no han intervenido efectivamente
esta situación. |
Puso
el ejemplo de Caprecom: Esta EPS no paga sus deudas ni
realiza abonos, pero su facturación mensual promedio
en el Hospital Universitario del Caribe es de $600 millones
por concepto de atención a sus afiliados, situación
que acrecienta su deuda y contribuye a que la cartera del Hospital
siga en aumento.
Ehrhardt Gutiérrez advirtió que es insostenible
la situación, pues en la prestación de servicios
del Hospital, por cada $1.000 pesos facturados se recuperan
$5 pesos: Sin embargo, por ser una institución
del Estado nos obligan a seguir atendiendo, pero sin un equilibrio
económico no tendremos insumos, no dispondremos de medicamentos
y menos pagaríamos la nómina; si llegamos a ese
punto, solo Dios sabe lo que pueda pasar con la salud en Bolívar.
Antes que eso, nuestra decisión es no brindar más
atención a estas EPS morosas y que sus afiliados les
exijan que paguen y que resuelvan qué hacer con los miles
de enfermos por los que deben responder.
Entre los procesos surtidos para la recuperación de la
alta cartera, se incluye la denuncia ante los diferentes entes
de control de las prácticas dilatorias de pago de las
EPS, se han conminado y pedido conciliaciones, se han hecho
cobros coactivos y cruces de cuentas; pero pese a estas acciones,
el flujo de pago de las obligaciones contraídas por las
entidades no es aceptable, comparado con el capital invertido
en la prestación de servicios. Sólo el pago de
estas deudas permitiría al Hospital Universitario del
Caribe recuperar el equilibrio que requiere para seguir funcionando,
para mantenerse al día en el pago de sus obligaciones
y para invertir en grandes proyectos de innovación en
salud en beneficio de sus miles de usuarios de la región.
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Principales
deudores del Hospital
Universitario del Caribe - Junio 30/2014 |
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Deudas
al HUC de entidades en intervención
o liquidación a junio 30 de 2014 - En millones de pesos |
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Crisis crónica en el Hospital
Universitario del Caribe
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El
Hospital Universitario de Cartagena se cerró a mediados
de 2003. La crisis se desató cuando el entonces presidente
Álvaro Uribe anunció que se liquidarían
las Empresas Sociales del Estado (ESE) no viables.
El cierre del hospital fue desastroso para Cartagena, porque
era el único público de alta complejidad con servicios
de diálisis, cirugía neurológica, tablas
completas de ortopedia, pediatría y atención de
quemados. También se perdieron los espacios donde se
formaban estudiantes de la Universidad de Cartagena y la posibilidad
de atender población de la región, pues allí
acudían pacientes de Sincelejo, Barranquilla y Montería.
El Dadis ya había cerrado servicios como urgencias, hospitalización
e imágenes diagnósticas, por no cumplir exigencias
de calidad. Los pacientes se trasladaron a otros centros.
La crisis comenzó con la Ley 100/93: durante 9 años
nunca se pagó a tiempo a los empleados y no pudo ser
auto-sostenible. Tras un año de intervención administrativa
y después de estudiar las condiciones del hospital, Supersalud
decidió terminar con una historia de servicio de 29 años.
El déficit superior a $40.000 millones, de los que $22.000
millones correspondían a deudas laborales, no dejó
otra salida. Fue así como el Hospital Universitario de
Cartagena se convirtió el 24 de julio de 2003, en el
primer hospital público de tercer nivel liquidado en
el país.
En noviembre de 2004 el presidente Uribe se comprometió
a aportar $19.000 millones, de los $42.933 millones que se requerían
para terminar de liquidar el hospital. Fue así como nació
el Hospital Universitario del Caribe que reemplazó al
Hospital Universitario de Cartagena, en liquidación.
Con él se esperó aliviar un poco la crisis en
que estaba sumida la ciudad por falta de entidades, especialmente
públicas, que garantizaran la atención. Pero hoy,
10 años después, amenaza con repetirse la historia
del cierre de este importante Hospital del Caribe. |
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